Pan
Época de cuarentena, sin poder salir de casa, sin poder comprar el pan cada día. Así que Harina y Levadura que no falte en casa.
Probamos hacer este pan, y es el que hacemos normalmente. La primera vez, me quedó soso, sabía a levadura sólo, pero la miga estaba perfecta. La segunda vez, quedó salado, me pase con la sal, para que no quedara soso otra vez, la tercera vez me quedó perfecto, la cantidad de sal es una cucharadita de sal fina, no rasa, sino colmadita.
Ingredientes:
- 175 gr. de agua
- 310 gr. de harina de fuerza o harina de trigo, sino tienen de la primera
- 20 gr. de aceite
- 15 gr. de levadura fresca o 7 gr. de levadura de panadería seca
- Una cucharadita de sal
Preparación:
Ponemos en el vaso de la Thermomix, el agua, el aceite y la levadura. Programamos 2 min., temp. 37º, vel. 2. Luego, añadiríamos la harina y la cucharadita de sal, y mezclamos unos 10 seg. a vel. 6. Si uso levadura seca, le pongo la levadura junto a la harina y no en el paso anterior.
Después, programamos 2 min., espiga, para amasar. Si la masa se despega de las paredes del vaso sin mucha dificultad, está lista, si no podemos echar un poco más de harina, hasta conseguir que no este muy pegajosa, y la podamos trabajar en la mesa, previamente enharinada.
Podemos trabajar más la masa con un rodillo (sobre todo, si hay un niño ayudándonos, como es mi caso, que no pueden estar sin tocar un rodillo), o con las manos. Le damos forma redondita o un poco alargada. Lo pincelamos con aceite y lo espoveramos con harina, para conseguir un aspecto más rústico. Le hacemos cortes con un cuchillo, dándole forma de pan.
En la receta original, pan milagro, ponen la masa en un molde Pirex con tapa, ligeramente engrasado, en otra página, también dan la opción de ponerlo en una bolsa de las de asar, cerrrada. Nosotros las primeras veces, la hemos puesto sobre la bandeja del horno y ha salido bien, luego hemos utilizado una bandeja de cristal y lo hemos tapado. Como no lleva tiempo de levado, me imagino que al ponerlo tapado, en el horno, se levará más.
Metemos la masa en el horno frío, sin precalentar, con un temperatura de 200º durante 40 o 45 minutos, hasta que lo veamos doradito.
Nos lo solemos comer en el día, pero si queda algo, se podría guardar en la nevera hasta el día siguiente y luego calentarlo un poco en la tostadora o en el horno.